Las empresas españolas votan por Brasil
La apuesta de las compañías por el país es a muy largo plazo. Sólo Telefónica, Iberdrola y Repsol han comprometido inversiones por 12.000 millones en los últimos años.
Para muchas empresas españolas, Iberoamérica supone una prolongación de su mercado natural, lejanísima geográficamente pero muy cercana en negocios. Y Brasil, el gigante de la región, es el corazón de esa estrategia.
Las elecciones presidenciales que se celebraron ayer mantenían en alerta a las grandes empresas españolas que operan en el gigante americano. Pero tanto con la victoria, ya confirmada, de Dilma Rousseff -la actual presidenta- o si hubiera vencido Aecio Neves, más tendente al centro, en poco o en nada cambiarían los planes de crecimiento de las compañías.
Telefónica, Iberdrola, Abertis y Repsol concentran gran parte de su negocio internacional en el mercado brasileño, en el que también están presentes ACS, Isolux, Mapfre y Gamesa, entre otros muchos grupos.
Sólo Telefónica, Iberdrola y Repsol han comprometido en los últimos años inversiones de 12.000 millones de euros para el desarrollo de sus negocios en Brasil, un país que, tras experimentar un fuerte crecimiento en el último lustro, comienza a dar síntomas de agotamiento.
Durante la presidencia de Dilma Rousseff, las multinacionales españolas han encontrado un marco estable para invertir, que, pese a todo, puede cambiar si la presidenta es reelegida y acomete alguna de la reformas que se exigen en el país. La llegada al poder de Neves sería bien recibida en los mercados por sus propuestas económicas de corte más liberal.
ComprasTelefónica ha convertido Brasil en su principal mercado tras España y en su principal motor de crecimiento. La compañía que preside César Alierta ha desembolsado hace apenas unas semanas 625 millones de euros en la compra de frecuencias de telecomunicaciones móviles 4G, tras ganar una subasta que le garantiza espacio para desarrollar su principal negocio en el país. Además, Telefónica invertirá otros 300 millones de euros en la adaptación de sus infraestructuras móviles a las nuevas frecuencias adquiridas. Esta inversión completa los 7.500 millones de euros que ha comprometido la multinacional española para la compra a Vivendi de GVT, que convertirá a Telefónica en la operadora líder de Brasil por número de clientes. Telefónica tiene el 28,75% del mercado, seguida por TIM Brasil, con el 26,93%. La mexicana América Móvil dispone del 24,96% de los clientes, mientras que Oi ha ido reduciendo su cuota hasta el 18,50%.
Al cierre de la operación, Telefónica controlará aproximadamente el 68,7% de la firma resultante de la integración de Telefónica Brasil con GVT, mientras que en torno al 7,5% del capital quedará en manos de Vivendi.
El pago en efectivo se financiará a través de una ampliación de capital en Telefónica Brasil, en la que participará Telefónica mediante otra ampliación destinada a cubrir el desembolso por la parte proporcional correspondiente a su participación del 74 % en la brasileña.
Al cierre de la operación, Telefónica controlará aproximadamente el 68,7% de la firma resultante de la integración de Telefónica Brasil con GVT, mientras que en torno al 7,5% del capital quedará en manos de Vivendi.
El pago en efectivo se financiará a través de una ampliación de capital en Telefónica Brasil, en la que participará Telefónica mediante otra ampliación destinada a cubrir el desembolso por la parte proporcional correspondiente a su participación del 74 % en la brasileña.
Derechos mineros
Por su parte, Repsol tiene derechos mineros sobre doce bloques: diez en exploración, con 1.297 kilómetros cuadrados de superficie neta. La petrolera española es la empresa operadora en cinco de estos bloques localizados en las cuencas de Santos, Espíritu Santo y Campos. En este último, Repsol Brasil contempla la inversión de 2.000 millones hasta 2016, junto a otros socios, en el desarrollo de los proyectos de exploración bautizados como Carioca y Sapinhoa.
En 2010, la compañía firmó una alianza con Sinopec para crear una empresa conjunta con la petrolera china, con el objetivo de garantizar la financiación de sus planes de inversión en Brasil. Sinopec adquirió un 40% de Repsol Brasil a través de una ampliación de capital en la que inyectó 5.600 millones de euros.
Mientras, Iberdrola dio un espaldarazo a su negocio en Brasil al adquirir, hace tres años, la firma de distribución eléctrica Elektro por unos 1.800 millones de euros. Previamente, el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán se había hecho con el 39% de la brasileña Neoenergia, una alianza que se ha traducido en los últimos ejercicios en la construcción de varios complejos eólicos repartidos por la geografía brasileña.
Por su parte, Repsol tiene derechos mineros sobre doce bloques: diez en exploración, con 1.297 kilómetros cuadrados de superficie neta. La petrolera española es la empresa operadora en cinco de estos bloques localizados en las cuencas de Santos, Espíritu Santo y Campos. En este último, Repsol Brasil contempla la inversión de 2.000 millones hasta 2016, junto a otros socios, en el desarrollo de los proyectos de exploración bautizados como Carioca y Sapinhoa.
En 2010, la compañía firmó una alianza con Sinopec para crear una empresa conjunta con la petrolera china, con el objetivo de garantizar la financiación de sus planes de inversión en Brasil. Sinopec adquirió un 40% de Repsol Brasil a través de una ampliación de capital en la que inyectó 5.600 millones de euros.
Mientras, Iberdrola dio un espaldarazo a su negocio en Brasil al adquirir, hace tres años, la firma de distribución eléctrica Elektro por unos 1.800 millones de euros. Previamente, el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán se había hecho con el 39% de la brasileña Neoenergia, una alianza que se ha traducido en los últimos ejercicios en la construcción de varios complejos eólicos repartidos por la geografía brasileña.
Autopistas
demás de estas operaciones, la presencia de las empresas españolas en Brasil ha crecido en los últimos años. Abertis cerró en 2012 la compra de las autopistas brasileñas que controlaba OHL, una operación que convirtió al grupo catalán de infraestructuras en el líder mundial de este negocio. A cambio, la constructora de Juan Miguel Villar Mir se posicionó como accionista de referencia de Abertis con el 15% del capital. La operación ha permitido a Abertis pasar a gestionar 7.000 kilómetros de autopistas y superar a su rival Vinci, con la integración de nueve concesiones en Brasil que suman 3.226 kilómetros.
demás de estas operaciones, la presencia de las empresas españolas en Brasil ha crecido en los últimos años. Abertis cerró en 2012 la compra de las autopistas brasileñas que controlaba OHL, una operación que convirtió al grupo catalán de infraestructuras en el líder mundial de este negocio. A cambio, la constructora de Juan Miguel Villar Mir se posicionó como accionista de referencia de Abertis con el 15% del capital. La operación ha permitido a Abertis pasar a gestionar 7.000 kilómetros de autopistas y superar a su rival Vinci, con la integración de nueve concesiones en Brasil que suman 3.226 kilómetros.
Fuente: 27/10/2014 – expasion.com
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Autor: David Gasull – asesor experto en comercio exterior y estrategias de internacionalización
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